Pedrillo, hambriento y cansado por su largo trayecto que había recorrido para llegar al pueblo de su antiguo amo, se fue a la iglesia en busca de ayuda. Allí, se encontró al cura, preparando una boda que tenia de hacer en unas horas. El cura, como solución a su problema, le ofreció faena en la iglesia, a cambio de comida y un lugar donde dormir, el chico lo acepto.
Su primera faena consistió en hacer de monaguillo en una boda, Pedrillo estaba muy nervioso y se meo encima, toda la gente empezó a reír y se fue corriendo. Por la noche el cura se reía de su desdicha y el, enfadado, se fue a dormir sin comer. La mañana siguiente, el cura no le quiso dar el almuerzo y el niño replico, al cabo de una hora, el cura se fue a dar un sermón a los ciudadanos, Pedrillo ya arto de tanto esperar se dispuso a emplear un plan ingenioso y beneficioso. Consistía en coger las llaves del almacén, pero estas estaban en la caja fuerte. Durante mucho tiempo, estubo buscando la contraseña, pero al final, se acordó que el cura se lo apuntaba todo en una libreta con la tapa lila, esa libreta estaba en el primer cajón de su habitación. Fue hacia allí y la cogio, todo seguido fue hacia la caja fuerte, cogio las llaves, fue hacia al almacén, abrió la puerta y, al fin, ¡PUDO COMER Y BEBER!
Pedrillo, harto de comer se fue a dormir, después llego el cura y se encontró la puerta abierta y dijo gritando:
- ¡Pedrillo! ¿Quién coño te a mandado a ti comerte todas mis reservas?
Pedrillo se despertó por tal alboroto y dijo con voz de no haber roto ningún plato en su vida:
- Yo no he hecho nada, yo te quiero mucho y no haría nada en contra tuyo, créeme.
El cura contesto:
- No me des excusas, vete de mi casa, no te quiero volver a ver en mi vida.
El chico, a punto de llorar se tubo que ir en busca de otro amo.
ROSER FIÑANA Y MIREIA SALTÓ
Su primera faena consistió en hacer de monaguillo en una boda, Pedrillo estaba muy nervioso y se meo encima, toda la gente empezó a reír y se fue corriendo. Por la noche el cura se reía de su desdicha y el, enfadado, se fue a dormir sin comer. La mañana siguiente, el cura no le quiso dar el almuerzo y el niño replico, al cabo de una hora, el cura se fue a dar un sermón a los ciudadanos, Pedrillo ya arto de tanto esperar se dispuso a emplear un plan ingenioso y beneficioso. Consistía en coger las llaves del almacén, pero estas estaban en la caja fuerte. Durante mucho tiempo, estubo buscando la contraseña, pero al final, se acordó que el cura se lo apuntaba todo en una libreta con la tapa lila, esa libreta estaba en el primer cajón de su habitación. Fue hacia allí y la cogio, todo seguido fue hacia la caja fuerte, cogio las llaves, fue hacia al almacén, abrió la puerta y, al fin, ¡PUDO COMER Y BEBER!
Pedrillo, harto de comer se fue a dormir, después llego el cura y se encontró la puerta abierta y dijo gritando:
- ¡Pedrillo! ¿Quién coño te a mandado a ti comerte todas mis reservas?
Pedrillo se despertó por tal alboroto y dijo con voz de no haber roto ningún plato en su vida:
- Yo no he hecho nada, yo te quiero mucho y no haría nada en contra tuyo, créeme.
El cura contesto:
- No me des excusas, vete de mi casa, no te quiero volver a ver en mi vida.
El chico, a punto de llorar se tubo que ir en busca de otro amo.
ROSER FIÑANA Y MIREIA SALTÓ
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