miércoles, 12 de marzo de 2008

TRATADO SEXTO

Lazarillas hartas de ir de amo en amo decidieron ir a buscar un trabajo digno para poder costearse su futuro. Estuvieron hablando y pensaron que el único que sabría de un trabajo en buen estado seria el cura del pueblo y así fue. El les comento que un amigo suyo necesitaba unas ayudantes de cocina, que si hacían lo que el les mandaba, les podría dar una casa, comida diaria e higiene. Pero primero tenían que aprender el oficio. Las Lazarillas aceptaron, ya que era el única remedio que tenían, se acercaron al restaurante y el señor las recibió muy amablemente. Después de cuatro años de trabajo, ya tenían suficiente dinero como para vivir por su cuenta, y les sobraba para un par de zapatos para cada una y un vestido.

No hay comentarios: